Os debo una pequeña crónica de cómo pase mi s vacaciones este verano. Lo siento, pero no me decidía sentarme a escribir con este fastidioso calor. Ahora que perece, que ya por fin se aleja, alguna cosa os puedo contar…
Como sabéis he estado en París, y voy a soltar un tópico, París es jodidamente precioso.
Hacia años que soñaba con pisar París, puede que, desde que leyera las primeras líneas de Rayuela al azar, luego más a conciencia, y luego las leyera casi con obsesión. O puede que después de que mis amigas S y R pisaran sus calles por primera vez, siguiendo los pasos de la Maga y Oliveira por el barrio latino, entre emoción y devoción y admiración y luego caminaran hasta Montparnasse para ir
Quizás nació de las historias que me contaba mi padre cuando yo era pequeño. El había estado en París de viaje de negocios varias veces y me la narraba como una preciosa cuidad cosmopolita, donde la cultura afloraba en cualquier esquina, una preciosa cuidad con un gran río que la partía en dos y donde los edificios eran tan bonitos, que el cuello te dolía durante muchos días de mirar siempre hacia arriba…
O puede que mi sueño de pisar París, se deba al día en que supe de una pequeña librería inglesa afincada en La Rue de la Bucherie, y de su preciosa historia…
…también recuerdo que quede fascinado la primera vez que vi aquella enorme torre de metal apuntando al cielo, y me prometí ir a verla…
….no se aún porque fui a París, intente descubrirlo, lo juro, pero no importa, no importa en absoluto, París me atrapo de tal manera que sacudió todo lo que había en mi, todas mi ideas y mis pensamientos, toda mi arrogancia y mi presunción quedaron al aire para aplastarme y darme una lección, toda mi reducida visión del mundo quedo en una mísera idea, estúpida y gastada, en una lección de horas de repaso. París es mucho mas de lo que te cuentan, es mucho mas que lo que ves, París es aquello que no puedes olvidar ya nunca mas…
…y volveré a París por supuesto, volveré al precioso Boulevard Saint Michel, volveré a las calles abarrotadas del barrio Latino, a las preciosas vistas del Sena desde el imprescindible Pont Des arts…volveré a ver a Julio a Montparnasse, esta prometido y sellado, a perderme entre sus preciosas tumbas de incontables inquilinos como baudelaire, Sartre…volveré a ver el Louvre y su pequeña y bella inquilina…volveré a tantas y tantas cosas…volveré una y otra vez, y siempre calzado con mis pequeñas y cómodas zapatillas negras…
Viaje alrededor de una mesa 